Ante el nuevo asesinato, El Diario se preguntó el viernes 17, en un editorial casi tan rotundo como el de dos días después, “¿A quién pedir justicia?”. La dramática interrogación era formulada desde la puerta norte de “un país en el que las autoridades han demostrado su objetiva incompetencia”, y está probada la “anuencia por omisión de los poderes establecidos” ante los poderes fácticos. De allí que insistieran en preguntar: “¿A quién le reclamamos que no lo hayamos hecho ya?”.
Por eso, el domingo ese dolido periódico fue más allá. Resolvió dirigirse a las bandas de delincuentes que tomaron a Ciudad Juárez, a las que llamó “autoridades de facto”, y a las que inquirieron “qué esperan de nosotros como medio”, pues “ya no queremos más muertos, ya no queremos más heridos ni tampoco más intimidaciones”.
miércoles, 22 de septiembre de 2010
Crimen en Ciudad Juarez
Entierro del reportero gráfico Luis Carlos Santiago, fotógrafo de El Diario de Ciudad Juarez, México. Quien fuera asesinado el último fin de semana por bandas organizadas de la ciudad.
...
En un acto de honradez inusitado, de realismo frente a la incapacidad gubernamental para garantizar la vida de sus miembros, ese periódico de Ciudad Juárez se dirigió a las autoridades de facto, a quienes controlan esa población fronteriza, a esos “señores de las diferentes organizaciones que se disputan la plaza de Ciudad Juárez”, para que expliquen “qué es lo que quieren de nosotros, qué es lo que pretenden que publiquemos o dejemos de publicar, para saber a qué atenernos”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario