jueves, 31 de mayo de 2012

Gianni Cipriano / Limbo




Isla de Lampedusa - Costas de Sicilia (Italia) / Puerta de Europa

miércoles, 30 de mayo de 2012

Alfredo Velarde / Exhortaciones del Tiempo






Muestra fotográfica Exhortaciones del Tiempo - Mercado Central de San Pedro
Fotografías: Alfredo Velarde 
Ciudad del Cusco. Mayo 2012

lunes, 28 de mayo de 2012

Argentina / Muestra Visual Contemporánea







 Selección de formatos audiovisuales realizados con soporte fotográfico. 
Foli, Abril 2012.

sábado, 26 de mayo de 2012

jueves, 24 de mayo de 2012

Rostros de Lima


La propuesta consiste en una instalación que asemeja una exposición dentro de una galería de arte o museo pero que, en este caso, tiene lugar en un espacio público. La exposición presenta una secuencia de espejos intervenidos caracterizados por diferentes colores y texturas en los vidrios, lo cual produce un efecto particular en sus reflejos. Cada espejo cuenta con un marco dorado de madera tallada que remite a los marcos que tradicionalmente se han utilizado para exponer los cuadros académicos y religiosos en las galerías de arte o museos, obras a través de las cuales se difundían una serie de contenidos de identidad nacional. Esta instalación plantea  que el ejercicio de verse reflejado en estas “obras de arte” (los espejos) puede ser tan o más significativo que la observación de los cuadros en museos y galerías, en tanto este reflejo personal pueda llevar al observador/participante a reconocerse como parte de la dinámica de la construcción de identidades de y en la ciudad.





Programa Cultura Viva 2011 
Parque Central del Grupo 2 – 7º Sector  - Villa el Salvador . Lima Sur

Instalación y Registro: JUAN CARLOS YÁÑEZ HODGSON

miércoles, 23 de mayo de 2012

Sesión de Nancy Obregón






Todas las fotografías: D. Vexelman / Diario Perú.21

martes, 22 de mayo de 2012

Richard Nixon en Lima







 Photos: Paul Schutzer / Archivo Revista Life
Casona de San Marcos. Lima 1958.

lunes, 21 de mayo de 2012

Tunchi / Ni Lo Uno Ni Lo Otro



Portafolio de Cesar Delgado

Lleva nueva años radicando en Francia y a través de sus imágenes nos cuenta cómo ve el mundo que lo rodea. Teto: www.expreso.com.pe/noticia/2012/04/22/un-fotografo-peruano-en-paris

Uno de los destacados exponentes de la Bienal de Fotografía de Lima, que hoy llega a su fin, es el fotógrafo peruano César Delgado Wixan, que radica en París desde hace 9 años y ha participado en esta muestra con dos series que ha desarrollado en los últimos años viajando por Europa.
Conversamos con él y nos detalló el significado de cada uno de sus trabajos. En la serie “Living at the movies”, que es presentada como una fotonovela, él nos habla del estado de ensueño en el que nos sumergimos cuando creemos escapar de la mirada de los otros.

Delgado nos explica que sobre este estado que consiste en imaginar una realidad distinta, Freud diría en una conferencia en 1908 que nos permite compensar las frustraciones de la existencia real. Las imágenes de esta serie representan a personajes en paisajes urbanos que son los actores-directores-espectadores de sus propias historias.
“Sudarios”, la segunda serie seleccionada para la Bienal, el fotógrafo nos sumerge en las oscuras noches parisinas. Delgado tiene el deseo de dar cuerpo al deseo, y fotografiar lo que no existe. Si en un inicio esta representación espectral de lo real se origina en una imagen crística, rápidamente toma cuerpo en los bares de sexo que habitan París. Espacios públicos donde las culpas se desvanecen en la obscuridad, dejando libre al deseo.
Sin duda, estas series fotográficas no se deben dejar de visualizar, para conocer un poco más del mundo de César Delgado Wixan, quien hace más de 20 años se dedica a este arte y ha venido participando en exposiciones desde el año 1989.
“Una de mis primeras participaciones fue en el I Coloquio peruano de fotografía en la U de Lima. Junto a Javier Silva y Roberto Huarcaya, dos fotógrafos de quien admiro su trabajo fotográfico”, nos cuenta este artista de la imagen.

Al preguntarle sobre qué significado tiene la fotografía para él, nos confiesa que le interesa porque le permite saber más de los otros. “Mi manera de comprender el mundo se basa más en lo visual que en la palabra”, continúa; “Es por eso que desarrollo mi trabajo desde hace muchos años sobre el retrato, intentando descubrir de alguna forma la identidad de cada individuo. En mi última serie “Living at the movies” (Viviendo como en las películas) he fotografiado gente en varias ciudades del mundo, en un estado de ensueño. Me parece que en este momento, donde se cae la máscara social, se puede ver lo que compartimos todos, que sea nuestra edad, nacionalidad o cultura: necesitamos soñar para escapar de las frustraciones de la vida”, sentencia este reconocido fotógrafo.

viernes, 18 de mayo de 2012

jueves, 17 de mayo de 2012

Exposición de Figueroa Aznar

Bajo la curaduría de Gustavo Buntinx, este jueves 17 de mayo, a las 7:30 de la noche, la Bienal de Fotografía de Lima inaugura en el Museo de Arte Italiano una de sus exposiciones más complejas y ambiciosas, con numerosos materiales inéditos y varias revelaciones sorprendentes. Se trata de una intensa revisión crítica de la obra de Juan Manuel Figueroa Aznar (1878 – 1951), cuya trayectoria aún poco reconocida fue sin embargo esencial para ciertos desarrollos cruciales en la cultura peruana del siglo XX.

Son notables los aportes de Figueroa Aznar al indigenismo cuzqueño, por ejemplo, y a la fascinación neo-incaica, tanto en sus expresiones más complejas como en las derivaciones kitsch de ambas expresiones entrelazadas. Resultan además verosímiles las varias versiones que le adjudican el diseño de la marca de fósforos “La llama”, ese ícono culmen del imaginario comercial peruanista. Pero son incluso más significativas sus intervenciones en lo que la exposición denomina el travestismo cultural, esa tendencia indumentaria que lleva a intelectuales e incluso hacendados y comerciantes de formación europea a asumir los atavíos de campesinos andinos –al menos para la foto. Esto último resulta decisivo: Figueroa Aznar es uno de los maestros de la pose, constituyéndose por ese y otros motivos en uno de los protagonistas decisivos de la ahora denominada Escuela Cuzqueña de Fotografía, llegando a mantener importantes vínculos personales y profesionales con Martín Chambi.


Nacido en Ancash y criado en Lima, a principios del siglo XX Figueroa Aznar recorrió Sudamérica y trabajó en los mejores estudios fotográficos de Arequipa. Hacia 1904, sin embargo, se radica en el Cuzco ejerciendo desde entonces una amplia influencia sobre la escena cultural nueva y revolucionaria que estaba allí en germen. Una influencia varia: la de Juan Manuel fue una creatividad múltiple y densa que alternó libremente entre las artes fotográficas y las plásticas y las escénicas, articulándolas con resultados híbridos que ponen en elocuente evidencia las complejidades y contradicciones de una sociedad en transición y trance.

Las ilusiones de una época y de una sociedad: Figueroa Aznar se ubica tanto en la culminación tardía de la tradición señorial en el sur andino como en los inicios de las nuevas tendencias incaistas e indigenistas. Sus aportes a cada una de esas instancias resultan llamativos, introduciendo con frecuencia en ellas elementos de insólita modernidad y singular auto-conciencia artística. 


 Exploraciones conjugadas con una experiencia vital impresionante, que lo lleva a también asumir cargos públicos desde los que tuvo un papel importante en la construcción de nuevas vías que vincularan al Cuzco con el Oriente y las selvas de Madre de Dios. Todo ello desde una relación sostenida con el sentimiento –el sentimentalismo casi– hacia la tierra y lo propio y lo nativo que caracteriza la sensibilidad de ciertas elites rurales a las que Figueroa Aznar se vinculó íntimamente en 1908 al contraer matrimonio con Ubaldina Yábar Almanza (1892-1999), integrante de una de las familias más relevantes de Paucartambo. Buena parte de lo más incisivo de la obra de Juan Manuel tiene que ver con las difíciles y complejas relaciones entre hacendados y campesinos –entre “blancos”, “mestizos” e “indios”– en esa sociedad semi-feudal, la negociación de la diferencia, en los términos acuñados por la curaduría.

La exposición procura hacer justicia a esas intensidades múltiples, procurando poner en evidencia crítica la complejidad de sus significaciones tanto históricas como culturales. Contrastando, por ejemplo, la atención puesta por Figueroa Aznar a las ruinas prehispánicas (son magníficas sus fotografías de Machu Picchu) con su interés constante por el registro de los avances tecnológicos y comunicacionales (puentes, carreteras, vías férreas). O confrontando los logros preciosistas de sus retratos elegantes con cierta mirada dramática que excepcionalmente se vuelca sobre la miseria popular e indígena.


Ese permanente juego de contrapuntos encuentra una cierta culminación en las escenografías y representaciones teatrales de la Misión de Arte Incaico, organizada en 1923 para el deslumbre de los públicos más cosmopolitas de Buenos Aires (en el Teatro Colón, nada menos) y Montevideo. Pasando por la capital andina de La Paz.

Todo ello se encuentra resumido en una muestra que procura reunir lo más representativo de la obra supérstite y ubicable de Figueroa Aznar en cada una de sus prácticas principales: fotografías, foto-óleos, pinturas, esculturas, bocetos. También registros de piezas importantes pero imposibles de trasladar, como la docena de murales que actualmente se desmoronan en una hacienda abandonada entre el Cusco y Abancay.

Ese deterioro es tal vez el subtexto principal de la exposición. Hace décadas que ya no existe la sociedad auscultada por este rescate incisivo. Cientos de imágenes ofrecidas como los fragmentos elocuentes de una ruina histórica: el esplendor y ocaso del Cusco señorial.


miércoles, 16 de mayo de 2012

Lima 1983






Archivo Revista Geomundo / Fotos: Lima de Ayer y Hoy